El investigador leridano Ferran Barbé, tercer científico más influyente de la comunidad internacional en el ámbito de la apnea del sueño

Según una investigación que ha analizado los 100 artículos más citados en la literatura médica

El director clínico territorial de enfermedades respiratorias crónicas del Hospital Universitario Arnau de Vilanova de Lleida (HUAV), catedrático laboral de la Facultad de Medicina de la Universitat de Lleida (UdL), e investigador del Instituto de Investigación Biomédica de Lleida (IRBLleida), Ferran Barbé, es el tercer científico más influyente de la comunidad internacional en el ámbito de la apnea del sueño. Así se recoge en un artículo del último número de la revista Sleep and Breathing, en que los autores han analizado bibliométricamente los 100 artículos más citados en la literatura médica centrada en el sueño y la respiración.

El autor con más número de artículos es el profesor David Gozal de la Universidad de Missouri de los Estados Unidos, nombrado doctor honoris causa por la Universitat de Lleida. El segundo lugar es para Virend Somers de la clínica Mayo, también de los Estados Unidos y, el tercer lugar lo ocupa, el investigador leridano.

Barbé es jefe del grupo de investigación Investigación translacional en medicina respiratoria del Instituto de Investigación Biomédica de Lleida (IRBLleida) y director científico del Centro Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Respiratorias (CIBERES).

La investigación ha incluido a cuatro neumólogos españoles en el top 10 mundial. Los otros tres son José María Marín, neumólogo del Hospital Miguel Servet de Zaragoza y profesor titular de la Universidad de Zaragoza; Joaquín Durán-Cantolla, jefe de investigación del Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba de Vitoria-Gasteiz y profesor de la Universidad del País Vasco, y Francisco José García Río, jefe de sección de neumología del Hospital La Paz de Madrid y profesor de la Universidad Autónoma de Madrid.

La apnea obstructiva del sueño es un trastorno respiratorio caracterizado por la falta intermitente de aire al dormir y un sueño fragmentado, que se ha asociado con un aumento de la morbilidad y la mortalidad por su relación con la hipertensión, el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.

El jefe del grupo de investigación Investigación translacional en medicina respiratoria, Ferran Barbé